viernes, 23 de enero de 2009

REINO PLANTAE

El reino de las plantas comprende aproximadamente 350 mil especies conocidas que varían desde los organismos unicelulares hasta árboles enormes, lo que demuestra las relaciones evolutivas entre todas ellas.
El Reino Plantae incluye a:
Plantas No Vasculares: Phylum Rodophyta, Phylum Phaeophyta, Phylum: Chlorophyta, Phylum Bryophyta.
Plantas Vasculares o Metaphyta: Phylum Tracheophyta.


Rodofitas, Feofitas y Clorofitas son algas o plantas acuáticas; se caracterizan por no presentar tejidos que conduzcan agua o sustancias elaboradas, es decir carecen de un sistema de transporte o vasos (sistema vascular), además de no tener raíces, tallos ni hojas verdaderas, ya que por vivir en el agua, ésta y los minerales disueltos en ella son fácilmente accesibles a todas las partes de la planta. El agua además les brinda sostén.
Briofitas, al igual que las anteriores, son plantas no vasculares, ya que también carecen de sistema de transporte, raíces, tallos y hojas verdaderas, pero a diferencia de ellas, son plantas terrestres.

Traqueofitas, son plantas terrestres más complejas; poseen tejidos especializados para transportar agua y sustancias elaboradas a través de toda la planta, por lo que son llamadas plantas vasculares. El agua y los minerales suben desde la tierra a todas las partes de la planta por un tejido conductor llamado xilema; en tanto las sustancias elaboradas por la planta durante la fotosíntesis, bajan y se distribuyen a todo el cuerpo de la planta por el tejido llamado floema. Tanto xilema como floema están formados por células rígidas por lo que también sirven de sostén a la planta. Las traqueofitas o plantas vasculares son las más conocidas e incluyen a los helechos, los pinos y a las plantas con flores.

Plantas acuáticas no vasculares
Phylum Rodophyta
Las Rodofitas son llamadas algas rojas, están dotadas de un pigmento rojo llamado ficoeritrina además de poseer clorofila; son marinas generalmente pluricelulares conociéndose unas 3 mil especies. Entre sus principales características están:
Ser especies macroscópicas marinas, poseer clorofila “a” y “d” (pigmentos que poseen un complejo formado por porfirina y magnesio, pero carecen de la “b” y “c”). Viven en profundidades entre 100 y 175 metros donde sólo llega la luz verde, azul y violeta. Muchas tienen un recubrimiento de carbonato de calcio, lo que les da la apariencia de un pequeño coral o árbol petrificado. Algunas algas rojas, como las del género Gelidium están rodeadas de sustancias gelatinosas como el agar que se utiliza en los laboratorios para cultivo de microorganismos; en la industria alimenticia para espesar el yogurt y helados, así como para preparar dulces, ates, mermeladas y purés.
Presentan reproducción asexual y sexual, la mayoría produce óvulos y espermatozoides en estructuras especializadas de su cuerpo; ninguno de ellos se mueve, pero las corrientes de agua llevan los espermatozoides hasta los óvulos.

Phylum Phaeophyta
Las feofitas o algas pardas, son de gran tamaño, pudiendo llegar a tener hasta 100 metros de longitud; todas son fotosintéticas y la mayoría viven en las costas rocosas de los mares especialmente en las regiones templadas (de 1500 especies, solo tres son de agua dulce). Crecen en aguas poco profundas y están expuestas al aire durante la marea baja.
Las feofitas tienen un conjunto de pigmentos característico: sus plástidos, llamados feoplastos, contienen las clorofilas a y c, pero nunca la b.
El color de las algas pardas proviene del pigmento fucoxantina, almacenan un carbohidrato llamado laminarina.
Aunque se encuentran típicamente bordeando las costas, algunas algas de este phylum forman grandes masas que flotan en el interior de los océanos, como el famoso género Sargassum del mar de los Sargazos.

Phylum Chlorophyta
Es el más grande de las algas, y sus miembros son muy diversos; presentan un intenso color verde debido a la clorofila y a los pigmentos amarillos asociados a ella.
Las clorofitas se encuentran bien representadas tanto en aguas dulces como en aguas saladas, otras viven en la nieve, en el suelo y en los árboles.
Los pigmentos y las sustancias químicas en las paredes celulares de las algas verdes son muy parecidos a los de las plantas superiores.
Pueden consistir de una célula, una colonia, un filamento, o una placa de células.
Se cree que las clorofitas representan la línea principal de evolución hacia las plantas superiores, por lo que se han realizado múltiples estudios con respecto al origen de la pluricelularidad, evolución y la alternancia de generaciones (proceso en el cual una generación diploide es seguida de una haploide durante el ciclo de vida del organismo).
Ejemplos de algas verdes: unicelular, Chlamydomonas, Chorella; colonial, Volvox, Hidrodictyon; multicelulares: Ulothrix, Spirogyra y Ulva.

lunes, 19 de enero de 2009

Micosis: Una afección que se puede padecer todo el año

¿Qué son las micosis?
-Las micosis son las enfermedades producidas por hongos. Existen muchos tipos de hongos pero no todos afectan al ser humano. Los que habitualmente lo afectan son aquellos que están acostumbrados a vivir en él. Si bien existen micosis superficiales y profundas, las que se ven frecuentemente en la consulta diaria son las primeras, que comprometen las capas superficiales de la piel.
¿Dónde pueden aparecer?
-Pueden localizarse en cualquier parte del cuerpo. Pueden afectar el cuero cabelludo y manifestarse como caspa, dermatitis seborreica.
Otras veces pueden presentarse como manchas más o menos pigmentadas que el resto de la piel, de diferente extensión, en el cuello y el tronco.
También las micosis ocasionan fisuras interdigitales de las manos y los pies, lesiones rojizas y redondeadas en cualquier sitio, y zonas inflamadas en las axilas e ingles.
Existe una forma difícil de erradicar que es la onicomicosis, que compromete las uñas de los pies y, menos frecuentemente, las de las manos.
¿Qué síntomas producen las micosis?
-Las micosis corporales aparecen con una lesión visible, inflamatoria, que en el caso del "pie de atleta" produce picazón, olor desagradable, fisuras y favorece la infección bacteriana secundaria.
¿Dónde habitan los hongos?
-La fuente de contaminación puede provenir de otro ser humano, de un vector animal (gatos, perros, conejos) o puede estar en la tierra. El hongo produce una forma de resistencia denominada esporo y puede permanecer meses en un ambiente hasta que encuentra un lugar propicio donde desarrollarse.
¿Existe una predisposición a tener micosis?
Como en toda enfermedad humana, se requieren dos condiciones para afectarse: primero la predisposición individual (en general, factores genéticos que se van transmitiendo de generación en generación, o factores ambientales que tiene mucho que ver con el hábitat de los hongos) y, segundo, el contacto con el agente infeccioso que produce la enfermedad.
El ambiente ideal para los hongos: calidez y humedad
A los hongos les interesa para reproducirse un ambiente húmedo y cálido. La temperatura alta y la humedad, durante la primavera y el verano, son ideales.
¿Las micosis sólo aparecen en verano?
-No, las micosis pueden aparecer en cualquier época del año, aunque en el verano son más frecuentes porque con altas temperaturas el hongo prolifera.
Las micosis puede padecerlas el hombre durante todo el año, especialmente en los pies y en las uñas, producidas por un tipo de hongo llamado tricofito, que está muy adaptado para vivir en el cuerpo y, sobre todo, en las uñas de los pies. Este hongo tiene fases de proliferación rápida y fases de no proliferación o quietud, cuando las condiciones le son adversas.
¿Por qué debemos curar las micosis?
-El hongo puede convivir con el hombre, dejando que éste lleve una vida cuasi-normal, o le puede producir enfermedades como el "pie de atleta", que a partir de una inocente descamación, se puede convertir en una verdadera puerta de entrada para que después se alojen allí microbios que producen infecciones importantes y potencialmente severas.
La mejor defensa que tiene el ser humano contra la infección es la integridad de la piel. Cuando ésta se rompe, los microbios entran sin ninguna dificultad.
El trastorno estético también debe ser considerado, especialmente en las uñas, que por la micosis cambian de color, pierden brillo, se arrugan y se quiebran. Los cambios más leves son enmascarados por las mujeres utilizando esmalte.
Si bien la corrección estética es buena, es mejor tratar y curar las micosis.
Grupos de riesgo
Dos factores fundamentales que influyen en esta afección son el ambiental y el ocupacional:
Personas que por su trabajo están calzadas con botas o con un calzado cerrado todo el día. Esto les produce un incremento de la transpiración que favorece la proliferación de hongos. No olvidemos tampoco que las fibras sintéticas de las medias y la ropa interior favorecen el crecimiento de los mismos.
Otro grupo de riesgo son aquellas personas que deben mantener permanentemente sus manos en el agua y luego no se las secan bien. Estos individuos son propensos a tener micosis.
Las personas de edad avanzada tienen mayor posibilidad de tener micosis debido a la natural caída de las defensas orgánicas propias de esta etapa de la vida.
Las micosis más frecuentes de los niños
"El hongo que más frecuentemente produce micosis en los niños es el Microsporum canis, hongo que se alberga en el perro y en el gato. Todos sabemos que los niños son los que, con mayor frecuencia, toman contacto con la mascota, lo que facilita la adquisición de la micosis.
La solución para combatir este tipo de micosis es tratar al niño enfermo y también al animal doméstico que lo contagió".

Tratamientos eficaces
¿Qué tratamientos se están utilizando hoy?
-Actualmente, el producto tópico más utilizado por su alto grado de efectividad es el clotrimazol, antimicótico de amplio espectro, derivado del imidazol. El efecto antimicótico de este principio activo es, en primer lugar, micostático, y en altas concentraciones también es fungicida.
¿Son muy largos los tratamientos?
-Los tratamientos de las micosis duran aproximadamente 3 ó 4 semanas. Recordemos que si se interrumpe el tratamiento con demasiada prontitud, la infección puede no haberse erradicado completamente y la micosis reaparecerá.
Consejos para prevenir las micosis:
Tener buen nivel de alarma: no es lo mismo tratar una micosis incipiente que una micosis avanzada.
Practicar buenos hábitos higiénicos.
Evitar los calzados cerrados en la época de verano y ventilar el pie en forma periódica.
Evitar calzados de goma.
Secar bien nuestro cuerpo luego de ducharnos o concurrir a natatorios.
Cuando se padecen estas afecciones, concurrir al especialista dermatólogo.